Eva Portas Fernández
Área de consultoría técnica del Centro Tecnológico del Granito
www.fctgranito.es
Igual que cualquier otro producto de construcción, la piedra natural requiere de unos controles que aseguren sus cualidades. Los controles a realizar sobre los productos de piedra se deben hacer en las fases de fabricación, suministro y recepción en obra y son, por un lado, responsabilidad del fabricante y, por otro, de la Dirección de la obra.
Controles en la fase de fabricación: el Marcado CE
Desde el año 2003, los fabricantes de productos de piedra natural están obligados a realizar una serie de controles sobre su producción, relacionados con el marcado CE, requisito obligatorio para su comercialización en la Unión Europea. Por este motivo, las empresas productoras deben implantar un sistema de autocontrol en su fábrica, consistente en realizar una serie de ensayos en laboratorio, con cierta frecuencia, para el conocimiento de las propiedades físico-mecánicas del material y, por otro lado, controlar dimensionalmente y visualmente su producción. Todo ello sujetándose a las normas EN europeas de aplicación a cada producto.
Tras implantar el proceso de autocontrol en su fábrica, el fabricante elabora dos documentos: una Declaración de prestaciones del producto y una etiqueta identificativa del Marcado CE, que se coloca sobre éste.
Controles previos al suministro de las piezas
Las heterogeneidades propias de la piedra natural constituyen, en ocasiones, motivos de disputa entre la parte contratante y el suministrador, al no haberse obtenido el aspecto esperado una vez que la obra ha finalizado. Esto es debido a que la piedra natural suele presentar variaciones importantes de color, textura, veteado, etc., asociadas a su origen natural y que, por otra parte, no tienen porqué constituir motivo de rechazo. De hecho, muchos proyectistas buscan en las variaciones de aspecto realzar el valor estético de la obra. Se podría decir, con carácter general, que las variaciones de aspecto, con una colocación suficientemente armónica, pueden constituir una herramienta más del diseño arquitectónico en lugar de un motivo de rechazo. Por todo ello, se hace necesario que el fabricante facilite, antes de la entrega del material, una muestra de referencia constituida por, al menos, cuatro piezas y que cubran una superficie de, al menos, 0,36 m2. Dicha muestra, que tendrá que representar los aspectos extremos y medios del material, deberá ser aceptada por acuerdo entre el suministrador, la Dirección de la obra y la propiedad. Los criterios para la aceptación o el rechazo de determinados defectos deben definirse en contrato, entre el fabricante y su cliente antes del inicio del suministro. Generalmente, se consideran motivo de rechazo defectos como piezas rotas, piezas con fisuras abiertas en alguna cara, roturas en las esquinas de las piezas y desconchados de los bordes.
Pavimento con piezas de distintas tonalidades, con una colocación armónica
Controles de recepción en obra
La correcta utilización de la piedra natural requiere un control de recepción en obra que asegure lo establecido en el proyecto. Existen diferentes sistemas de muestreo que podemos aplicar para inspeccionar en obra los productos de piedra, durante su recepción. Uno de ellos es el que se recoge en la norma ISO 2859-1:2012. Procedimientos de muestreo para la inspección por atributos. Parte 1: Planes de muestreo para las inspecciones lote por lote, tabulados según el límite de calidad de aceptación (LCA). Para aplicar este sistema, tenemos que tener en cuenta, en primer lugar, varias cuestiones que se indican a continuación:
- El producto en obra debe agruparse en lotes. Se entiende por lote el conjunto de unidades de un producto determinado, objeto de control. Es importante que el tamaño y la forma de los lotes se acuerde entre el proveedor y el responsable del muestreo, incluso especificándolo desde proyecto, siendo habitual que cada partida que llega a obra constituya un lote.
- De cada lote extraeremos una muestra, que se compondrá de un número de unidades representativas del mismo. La muestra se extraerá del lote, en general, de manera aleatoria.
- La norma ISO de referencia establece una serie de niveles de inspección, tres niveles de inspección normal y cuatro niveles especiales de inspección, denominados S-1, S-2, S-3 y S-4. El nivel de inspección que se recomienda para piedra natural el S-3.
- Límite de Calidad de aceptación LCA (%): Es la media del porcentaje máximo de no conformidades que se pueden tolerar en una serie de lotes para considerarlos satisfactorios. En piedra natural el LCA que se está utilizando es del 4%.
Sabiendo todo ello, para aplicar este sistema debemos utilizar una serie de tablas normalizadas donde se indican los criterios de aceptación y rechazo de los productos en función del tamaño de nuestros lotes en obra.
En la tabla1, en función del tamaño de piezas que componen nuestro lote, y estableciendo un nivel de inspección S-3, se nos indica un código de letra. En la tabla 2, con la letra indicada en la tabla 1, se nos proporciona el tamaño de muestra adecuado que debemos extraer del lote. Con este tamaño de muestra y estableciendo un LCA del 4%, se nos indican los criterios de aceptación y rechazo del lote.
Por ejemplo: En la tabla 1, para un tamaño de lote de 5000 piezas (marcado en rojo), se establece una letra-código F. En la tabla 2 se nos indica que debemos extraer de nuestro lote, una muestra de 20 piezas. Para el LCA del 4%, se proporciona el siguiente criterio: Ac 2, Re 3. Esto querría decir que, si dos piezas salen no conformes, se acepta el lote y, si tres piezas salen no conformes, se rechaza el lote.
Conociendo entonces la sistemática, los controles que se recomienda realizar sobre la muestra serán, como mínimo, los siguientes, teniendo en cuenta que deben ser un conjunto de pruebas que se realicen de forma rápida para no interrumpir la marcha normal de la obra.
1. Controles dimensionales: Se deben controlar al menos la longitud, la anchura y el espesor de las piezas, verificando si se cumplen las tolerancias dimensionales indicadas en la norma EN relativa a cada producto.
2. Aspecto: Este control resulta importantísimo para el buen fin de la obra. Se debe colocar en un expositor y con luz natural lateral una muestra constituida por un número de piezas que representen las características extremas y medias de la piedra desde el punto de vista de su color, textura, discontinuidades, etc.
3. Ensayo de absorción de agua según EN 13755 y ensayo de resistencia a la flexión según EN 12372: Se realizarán en laboratorio y constituyen dos pruebas rápidas que darán idea de si el material suministrado representa al declarado en la etiqueta CE del fabricante.
Además de estos controles, los responsables de la recepción de los productos en obra deben asegurarse de que éstos vienen debidamente documentados, con la etiqueta CE, si procede, y sin defectos derivados de su fabricación y/o transporte.
Cabe decir que, con esta metodología, se benefician tanto la Dirección de la obra que, a través de los ensayos, va a disponer de unos parámetros de cálculo realmente representativos del material, como el fabricante, que va a verificar la calidad de su producción. Y, por supuesto, el usuario final, que va a beneficiarse de un producto construido con unos materiales controlados.
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