En el noroeste de Camboya, a 300 km de su capital Phom Penh, se encuentra la capital del antiguo Imperio Khmer (Jemer), Angkor. Escondida durante siglos en medio de la selva, ha estado totalmente aislada del mundo occidental hasta que en el año 1.860 fue descubierta por misioneros franceses.
El origen de esta ciudad se sitúa bajo el reinado de Jayavarman II (810-850 d.C.), fundador del Imperio Khmer, quien comenzó el culto a las deidades hindúes, y su esplendor duró hasta el año 1.225, aproximadamente. El conjunto arquitectónico, que ocupa una extensión de 400 km2, está compuesto por templos monumentales construidos durante este periodo y son una joya del arte hindú. En 1.992 la UNESCO nombró a todo el conjunto monumental de Angkor Patrimonio de la Humanidad.
Los principales grupos de templos son Angkor Thom, Ta Prom y Angkor Wat. Los más antiguos fueron construidos con ladrillos, en los posteriores se empleó laterita, una piedra barrosa coloreada, y los más recientes son de arenisca.
Lo que más llama la atención del Templo de Ta Prom, el único que no ha sido restaurado, es que la naturaleza ha ido ganando terreno y los árboles, con sus enormes raíces que invaden los monumentos, forman ya parte del conjunto escultórico. En Angkor Thom se encuentra el templo Bayon, construido en el siglo XII bajo el reinado de Jayavarman VII, que cuenta con un foso de 100 metros de profundidad y 12 km de extensión, que protegía a una población de cerca de un millón de personas.
Su torre de 45 metros de altura está coronada por cuatro enormes cabezas esculpidas y rodeada de 54 torres menores, cada una de ellas con cuatro cabezas sonrientes que se supone representan al propio rey.
El templo más representativo de todo el conjunto es el llamado Angkor Wat, dedicado al dios hindú Visnu, mandado construir por el rey Suryavarman II, que reinó entre los años 1.131 y 1.150 después de Cristo. Se calcula que para la construcción de este templo se empleó la misma cantidad de piedra que para la construcción de la gran pirámide egipcia de Keops, en Gizeh. Se emplearon 30 años en su construcción. Este templo está orientado hacia el Oeste, al contrario de los otros templos, que están orientados hacia el Este. Está formado por cinco torres de una simetría perfecta que representan las cinco colinas del monte Meru, la casa de los dioses y centro del universo hindú. Un foso y tres galerías rodean los cinco santuarios centrales. Cuenta con el mayor bajorrelieve del mundo, que narra historias de la mitología hindú. Todo el conjunto ocupa dos kilómetros cuadrados, y es el mayor templo religioso del mundo.
Las esculturas del templo de Angkor Wat se encuentran en buenas condiciones ya que, tras el declive del antiguo Imperio Khmer, pasó a ser un templo budista y fue continuamente mantenido, lo que ha ayudado a su conservación, al contrario de los otros templos de Angkor. De lo que no ha podido librarse, como gran parte de los monumentos de oriente, ha sido del saqueo y del pillaje. Han llegado a llevarse incluso trozos de los relieves, como puede verse en las imágenes.
La historia de Angkor Wat se remonta al siglo II después de Cristo, época en la que se estableció el reino de Funan, de origen indio. Se establecieron en la zona comerciantes indios y durante cuatro siglos se vivió una época de prosperidad y tranquilidad. Al estar ubicada en una zona de paso entre China e India, los habitantes tenían influencias del hinduismo y del budismo chino, lo que se refleja en sus templos, que recuerdan a los del Norte de la India y Nepal.
El reino de Funan cayó en el año 600 frente al reino de Chenla, cesó el comercio con la India y el imperio de Indonesia llegó al poder. En el año 800 se estableció el reino de Kambuja, a cuyo frente estaba Jayavarman I, quien construyó varias ciudades cerca de Angkor Wat, fue responsable de muchos cambios sociales y amplió su imperio hacia el norte y hacia el este. Durante siglos, Kampuja vivió una época de prosperidad.
El rey Suryavarman, en el año 1.000 planificó la construcción de la ciudad de Angkor, labor continuada por su sucesor, Udayadityavarman II, quien restauró muchos templos y bajo cuyo reinado Angkor se convirtió al mismo tiempo en una ciudad sagrada y en el centro de un gran sistema de irrigación. La expansión duró dos siglos más, periodo en el que se construyó el templo de Angkor Wat. Pero a comienzos del año 1.200 el imperio Khmer y Angkor comenzaron a decaer. El imperio Thai emergió como el más poderoso de la zona y la conquista del imperio Khmer por parte del imperio Thai supuso el definitivo abandono de la ciudad de Angkor. La selva se adueñó durante siglos de muchos de estos templos.
Desde el año 1.908, el Conservatorio de Angkor es el responsable del mantenimiento de los templos, dependiente del Gobierno de Camboya. La guerra civil que durante 30 años vivió Camboya en los años 70, en la que los Jemeres Rojos masacraron muchos budistas como parte de su proyecto de reorganización social, no dañó mucho a los templos, numerosas estatuas fueron trasladadas a museos para su protección.
Los templos en la actualidad están siendo restaurados con la colaboración de arqueólogos de todo el mundo. Pero el mundo puede seguir maravillándose de esta obra maestra en piedra y contemplar entre las ruinas el paso del tiempo y cuánta historia y grandeza guardan estos templos.
Publicado en septiembre, 2001
Fotos: Lourdes Mate Peña