Pedro Oyhantçabal (a), Siegfried Siegismund (b), Karl-Jochen Stein (c), Jorge Spoturno (a)*
*(a) Depto. de Geología, Facultad de Ciencias Universidad de la República, Iguá 4225. (11400) Montevideo, Uruguay. E-mail: oyhantca@fcien.edu.uy - Tel: ++598 2 525 86 19. Fax: ++598 2 525 86 17
(b) Geoscience Centre of the University of Gottingen, University Göttingen, 37077 Göttingen, Goldschmidtstr. 3, Germany. E-mail: ssieges@gwdg.de - Tel: +49 +551 39-7929. Fax: +49 +551 39-9700
(c) Natursteininformationsbüro E-mail: Natursteinarchitektur@t-
Uruguay es un país de Sudamérica ubicado entre Brasil y Argentina. Pese a su pequeña superficie (176.215 km2) posee una geología muy diversa: en el Sur predominan las rocas del basamento precámbrico, mientras que en el Norte se desarrolla una cuenca sedimentaria Paleo a Mesozoica y flujos basálticos que forman parte de la cuenca del Paraná. Esta variada geología ofrece una amplia gama de rocas ornamentales. Los granitos y mármoles cuentan con una historia de más de un siglo de producción, principalmente para el mercado regional. Un caso a destacar es el de la dolerita negra de Uruguay, que representa la roca negra más valiosa del mundo, con una gran demanda constante en el mercado internacional y un precio superior a mil dólares por metro cúbico. Las rocas ornamentales mencionadas junto con las filitas y algunas rocas de interesante potencial, como las cuarcitas con fucsita y los conglomerados, permiten evaluar un futuro prometedor para el sector de rocas ornamentales de Uruguay. La escasez de reservas evaluadas, debido a la falta de exploración, junto a la utilización de métodos inadecuados de cantería son los principales factores que han limitado el desarrollo de la producción.
Introducción
Con una población de aproximadamente 3 millones de habitantes, la agricultura ha sido tradicionalmente la principal actividad económica. El país depende fuertemente de la estabilidad económica de sus países vecinos. La recesión que sufrió la región entre 1999 y 2002 afectó seriamente a la economía, pero se observa una recuperación gradual desde 2003 y el PIB (Producto Interior Bruto) aumentó alrededor de un 6% durante 2005 y 2006. Uruguay forma parte de MERCOSUR, una unión comercial con Argentina, Brasil y Paraguay, que permite el libre acceso a un mercado formado por más de 200 millones de habitantes. La red de comunicaciones por carretera es de calidad media a alta y de buena densidad y el territorio tiene una tasa de electrificación del 95%, por lo que la explotación de nuevas canteras no enfrenta problemas de infraestructura.
El país no tiene una tradición minera importante; el sector representa menos del 1% del PIB, pero a pesar de ello, la extracción de materiales para la metrópolis de Buenos Aires durante el siglo XX representó una actividad floreciente durante varias décadas. Mármoles, granitos y filitas fueron los principales tipos de roca ornamental explotada, aunque también tuvieron su importancia los adoquines, los bloques de roca y la roca triturada. Las oscilaciones mencionadas de la economía regional junto con la falta de estudios sobre estos recursos llevaron al declive del sector y la mayor parte de las canteras se encuentran inactivas en la actualidad.
Varios informes han considerado la situación de los recursos mineros no metálicos de Uruguay (Bossi, 1978; Coronel, et al., 1987; Oyhantçabal et al., 2000), pero es escasa la información publicada sobre las rocas ornamentales (Medina, 1990; Bossi & Campal, 1991; Carmignani et al., 1998; Oyhantçabal et al. 2006). En esta contribución se presenta una revisión actualizada del potencial del sector de las rocas ornamentales en el Uruguay.
Importancia socioeconómica de las rocas ornamentales en Uruguay
La actividad minera de Uruguay está basada en la explotación de materiales para la industria de la construcción, rocas ornamentales, oro, ágatas, amatistas y algunos minerales industriales como arcilla para cerámica y caliza para la industria del cemento.
El valor de la producción minera ha variado entre 20 y 50 millones de dólares (21 millones de dólares en 2005) y representa el 0,2 - 0,5% del PIB. La extracción de oro es cada vez más importante y en 2005 representó el 20% del producto del sector minero. Unas 2.000 personas trabajan en el sector minero, lo que supone un 0,1% de la población activa. La cifra media de exportación, unos 5 millones de dólares al año, significa un 0,2% del total de las exportaciones del país, lo que pone de manifiesto su actual posición marginal en relación a otros rubros de exportación. Oro, rocas ornamentales (granitos), amatistas y ágatas son los principales productos del sector minero exportados. El impacto de la la crisis regional de 1999-2002 en la producción de rocas ornamentales es evidente, así como también la recuperación gradual que comenzó en 2003. También es destacable la significativa importancia de la dolerita negra en el total de la producción de rocas ornamentales del Uruguay.
Marco legal
La actividad minera está regulada por la ley 15.242 del año 1982 y la Dirección Nacional de Minería y Geología (DINAMIGE) es la agencia estatal responsable del control de la actividad minera. El estado uruguayo es propietario de todos los recursos del subsuelo y otorga permisos a los particulares para llevar a cabo actividades mineras. Existen tres tipos de permisos: la Licencia de Prospección (hasta 3 años), la Licencia de Exploración (hasta 3 años) y la Concesión para explotar (hasta 45 años). El inicio de las actividades mineras requiere de una autorización ambiental previa.
Síntesis de la geología del Uruguay
El subsuelo del Uruguay forma parte de la Plataforma Sudamericana y su geología consiste en rocas del basamento precámbrico en el sur y sedimentos Paleozoicos a Mesozoicos y derrames basálticos que forman parte de la Cuenca de Paraná en el norte (Fig. 1). En al sur del país, dos cuencas de tipo rift (Cuenca de Santa Lucía y Cuenca Laguna Merín) se formaron en el Mesozoico, como consecuencia de la apertura del Océano Atlantico.
El basamento precámbrico aflora en aproximadamente el 45% de la superficie del país. Una primera división de este basamento, propuesta por Ferrando & Fernández (1971) diferenció las rocas Paleoproterozoicas del Sudoeste (Ciclo Transamazónico: 2.2 - 1.8 Ga) de las rocas Neoproterozoicas del Este (Ciclo Brasiliano: 900 - 550 Ma). Posteriormente, sobre la base de un modelo de tectónica de placas, Fragoso-César (1980) definió el Cratón del Río de la Plata al oeste (Paleoproterozoico) y el Cinturón Dom Feliciano en el este (Neoproterozoico). Por otra parte, con un enfoque de terrenos tectonoestratigráficos, Bossi et al. 1993 y Basei et al. 2000, han definido diferentes terrenos en el basamento pre-Brasiliano: el Terreno Piedra Alta al oeste, el Terreno Nico Pérez en el centro y el Terreno Punta del Este en el este.
Principales unidades geológicas de Uruguay (esquema basado en Preciozzi et al. 1985)
El Terreno Piedra Alta consiste en dos cinturones metamórficos: Arroyo Grande y Montevideo y una gran región granítica central con ortogneisses y ocasionales anfibolitas (Oyhantçabal et al. 2003). El evento tectonotérmico más antiguo registrado en ese terreno es de edad paleoproterozoica. El Terreno Nico Pérez es complejo y consta de diferentes unidades: granulitas de composición tonalítica a granítica; rocas máficas a ultramáficas asociadas a metacherts y una secuencia plataformal compuesta de metaconglomerados, cuarcitas y gneisses con muscovita. Los datos disponibles señalan edades Arqueanas a Paleoprotozoicas (Hartmann et al. 2002). En la parte más oriental del país, el Terreno Punta del Este representa un basamento pre-Brasiliano correlativo al complejo africano Namaqua y se formó presumiblemente entre 1,0-0,9 Ga (Preciozzi et al., 1999, Basei et al. 2005).
El Cinturón Dom Feliciano (DFB) de edad Neoproterozoica, aflora al este del país. De este a oeste está compuesto de tres unidades geotectónicas principales (Basei et al., 2000): un cinturón granítico (el batolito de Aiguá), un cinturón de esquistos (Grupo Lavalleja) y un cinturón de antepaís (el Grupo Arroyo del Soldado). Varias zonas de cizalla neoproterozoicas, de escala continental, están presentes en este cinturón (Sierra Ballena y Cordillera entre otras) y están asociadas con un importante retrabajamiento dúctil y frágil. Uno de los ejemplos más destacables es la zona de cizalla de Sierra Ballena, que representa probablemente un límite entre diferentes terrenos.
No se conocen registros de eventos de edad Ordóvica o Silúrica y la sedimentación en la cuenca del Paraná (Cuenca Norte del Uruguay) comenzó en el Devónico y continuó durante varios ciclos deposicionales marinos y continentales, hasta el Cretácico. La apertura del Océano Atlántico, producida entre el Jurásico y el Cretácico, está registrada en los derrames basálticos de la cuenca del Paraná, los que cubren más de 1 millón de km2 en Uruguay, sur de Brasil, Argentina y Paraguay. Este evento tectónico llevó también a la formación de cuencas de tipo rift (Santa Lucía y Laguna Merín), las que presentan un relleno de sedimentos continentales y volcanismo bimodal.
El Cenozoico está caracterizado por depósitos continentales restringidos a pequeñas cuencas y a una fina cobertura en algunas áreas del basamento cristalino. Un cratón estable es el escenario durante el Cenozoico y la sedimentación más reciente estuvo controlada por variaciones neotectónicas y eustáticas del nivel del mar y está restringida a la faja costera y los márgenes de los cursos de agua.
a).- Cantera Froche de Moskart (Granito Soca)
b).- Cantera Endollar de Moskart (Granito Soca) abandonada
c).- Cantera Piedrahita de mármol blanco Perla (en funcionamiento)
d).- Cantera Pichinango de dolerita negra: bloques de Negro Absoluto y Negro Oriental
e).- Bloques y tablas en la cantera Piedrahita de mármol blanco perla
f).- Frente de edificio revestido de arenisca Tacuarembó
g).- Cantera de filita
h).- Tablas de filita hechas a mano
Piedras dimensionales de Uruguay:
Granitos y rocas ígneas plutónica relacionadas
Varios tipos de rocas ígneas son extraídas en Uruguay para su utilización como roca ornamental. Los principales tipos son granitos alcalinos, granodioritas y doleritas. La mayor parte de la producción se exporta en bloques, pero dos aserraderos con equipos modernos, producen también placas pulidas y baldosas para suelos.
a).- Granito gris Moskart (Granito Soca)
b).- Sienita Artigas (plutón Pan de Azúcar)
c).- Sienita Guazubira (provincia de Pan de Azúcar)
d).- Dolerita negra Negro Absoluto (aglomeración de dolerita de Florida)
Granitos grises
Diversos plutones paleo y neoproterozoicos ubicados en diferentes áreas del basamento cristalino han proporcionado granito gris: Soca, Chamangá, Cerro Aspero y Cufré, entre otros (ver ubicación en Fig 1). A continuación se presenta información más detallada sobre los distritos más importantes (Chamangá y Soca).
Granito de Soca
La intrusión Paleoproterozoica de Soca (ver localización en Fig. 1) es un granito leucocrático de color oscuro y grano grueso. Está compuesto principalmente por cuarzo, feldespato alcalino, plagioclasa, biotita rica en hierro y anfíbol. La textura es porfírica con megacristales de microclina de hasta 7 cm de longitud en una matriz de grano grueso. Las características petrográficas, la mineralogía y la geoquímica indican que es un granito alcalino con características típicas de los granitos Proterozoicos Rapakiwi de tipo A. El granito está afectado por eventos tectonotérmicos posteriores a la cristalización, probablemente asociados a la actividad de la zona de cizalla de Sarandí del Yi, los que son responsables de la deformación frágil, observada especialmente en el sudeste y del desarrollo de una paragénesis secundaria de estilpnomelano, clorita y anfíbol verde-azulado. Esta paragénesis está relacionada con el origen del color gris-verde oscuro de este granito leucocrático (Oyhantçabal et al., 1998).
Dos variedades comerciales son extraidas en los alrededores de la ciudad de Soca: Moskart y Labradorita oriental. La producción en el período 1997-2005 muestra fuertes oscilaciones y una gama entre 0 (2002) y 798 (1998) toneladas al año. En 1991 se obtuvo un máximo histórico de 3.476 toneladas.
Granito de Chamangá
Esta intrusión Paleoproterozoica (ver localización en Fig. 1) es una graniodorita de color gris claro y grano medio. Está compuesta principalmente por plagioclasa, cuarzo, feldespato alcalino y biotita. Sus principales accesorios son epidoto, esfeno, granate y minerales opacos. La textura es muy homogénea, equigranular, a veces porfirítica, con escasos megacristales de feldespato alcalino de hasta 2,5 cm. Sólo ocasionalmente se observan enclaves máficos y diques pegmatíticos. La sobreimpresión tectónica frágil es muy poco importante y el espaciado de las juntas es normalmente de varios metros y de acuerdo con un patrón ortogonal, lo que hace posible la extracción de bloques de dimensiones comerciales, con buen rendimiento de producción.
En los alrededores del río Chamangá se extraen dos variedades comerciales: Gris Chamangá y Gris Loyner. La producción media del período 1997-2005 fue de 2.166 toneladas, con un máximo excepcional de 20.909 toneladas en 1993. El mercado principal para este granito gris es Japón. Teniendo en cuenta las propiedades geotecnicas, la homogeneidad y la escasa fracturación, se considera que este distrito tiene un buen potencial, siempre que se logre una adecuada relación coste/precio con técnicas de extracción y estrategias de mercado apropiadas. No obstante lo anterior, la frecuente presencia de petroglifos ha determinado que el área sea declarada recientemente paisaje protegido, por lo que difícilmente se autoricen nuevos emprendimientos mineros.
Granitos coloreados (rosa y rojo)
Pan de Azúcar e intrusiones sieníticas asociadas:
La intrusión de Pan de Azúcar, asociada al complejo Sierra de las Ánimas, es un plutón circular, de un diámetro de aproximadamente 5 km, compuesto de sienitas, sienitas cuarzosas y granitos. La geometría de la intrusión y su asociación con rocas volcánicas de similar edad sugieren una estructura anular, tanto para el plutón como para las intrusiones cercanas. Un reciente estudio señala el Neoproterozoico (570 Ma) como la era en la que se formó este magmatismo (Oyhantçabal et al. 2007).
Las litologías empleadas como roca ornamental son sienitas y granitos. Las sienitas están presentes en la zona marginal de la intrusión de Pan de Azúcar. Son de grano grueso a muy grueso y de color gris a rosa. Sus principales minerales son ortoclasa pertítica de hasta 4 cm y anfíbol, piroxeno y biotita. Los minerales accesorios incluyen apatita y circón. Las sienitas cuarzosas afloran en la parte central del plutón. Son de grano medio y sus colores van de gris a marrón rosado y rojo. La composición mineral es similar a la de las sienitas, pero con una pequeña presencia de cuarzo.
Como es típico en los granitoides alcalinos, su emplazamiento post-orogénico está asociado a una menor sobreimposición tectónica y además el feldespato alcalino exhibe una amplia paleta de colores en las diferentes intrusiones (gris, rojo profundo, rojo amarronado, etc. Estos factores, junto con la accesibilidad del área determinan que desde comienzos del siglo XX este distrito fuera la principal zona de producción de Uruguay, con una gran variedad de colores y diseños de roca ornamental. Las variedades comerciales más importantes son: Guazubirá (grano medio y color rosa-rojizo), Artigas (grano grueso y mezcla de gris y rosa), Bodega (grano medio y color rojo profundo), Sara Pink (grano fino y color rosa), etc. La producción media del período 1997-2005 fue de 1.502 toneladas, con un máximo excepcional de 3.800 toneladas en el año 2000 (estos datos incluyen la producción de algunas canteras pequeñas de granito de color de otras partes del país) El principal mercado para estos materiales es regional (ciudades de Buenos Aires y Montevideo) y, en las últimas décadas también Japón. La heterogeneidad del color junto a inadecuadas estrategias de márketing han sido los principales causantes del cierre de la mayor parte de las canteras. Pese a la situación actual, se considera que el potencial es bueno, siendo un requisito previo la evaluación de los recursos, de la relación costo/precio y las posibilidades de mercado.
Dolerita negra
Una provincia productora de roca negra de significación a nivel mundial, está asociada a un haz de diques de dolerita de edad Paleoproterozoica, emplazado en el terreno Piedra Alta del cratón del Río de la Plata (Fig. 1). El haz de diques se extiende a lo largo de 160 km con dirección aproximada 060º. La longitud de los diques individuales alcanza algunos kilómetros y su ancho varía de 10 a 50 m. La composición es toleítica y se han reconocido dos subprovincias, con alto y bajo contenido de titanio respectivamente (Bossi & Campal, 1991; Bossi et al. 1993). Las doleritas están compuestas de plagiocasa, clinopriroxeno y minerales opacos, siendo la textura subofítica. Las principales fases accesorias son biotita, apatito e intercrecimientos intersticiales de cuarzo y feldespato alcalino (micropegmatita). Los bordes de anfíbol uralítico en piroxeno son muy delgados, lo que determina que no se presentan tonalidades verdosas indeseadas, siendo el color negro de la roca pulida de alta pureza.
Se extraen dos variedades de dolerita: una es negra oscura y de grano fino (Negro Absoluto) y la otra es gris oscura - negra y de grano medio (Negro Oriental). La primera es más apreciada en el mercado, pero los bloques de dimensiones comerciales no son comunes. Rara vez se dan heterogeneidades en el color, cuando ocurren está asociadas a la presencia de cuarzo y feldespato alcalino de color blanco en agregados intersticiales o en finas venillas. El principal problema para la producción de bloques comerciales es la abundancia de fracturas, que determina un bajo rendimiento de producción en la extracción (<10%). La producción muestra fuertes oscilaciones y varió entre 919 y 3.797 toneladas al año en el período de 1997 a 2005.
Esta roca negra tiene una gran demanda en los mercados internacionales, con precios superiores a los mil dólares por metro cúbico. La buena calidad y la demanda mundial de rocas de color negro profundo, determinan un alto potencial para estas doleritas, aunque hace falta investigación para solucionar los problemas de exploración y extracción.
Mármol
Los afloramientos de mármol en Uruguay están relacionadas con el metamorfismo regional Neoproterozoico de las secuencias plataformales del Cinturón Dom Feliciano. En varios casos, los depósitos están relacionados con aureolas de metamorfismo de contacto, alrededor de intrusiones graníticas.
Las principales provincias productoras son:
Área de Polanco: mármoles blancos de grano grueso, relacionados con la aureola metamórfica del Granito Polanco. Son comunes en estos mármoles agregados de tremolita radial, desarrollada como consecuencia de metamorfismo de contacto. Las reservas son pequeñas, porque la mayor parte de los depósitos corresponden a roof pendants en la intrusión. La fracturación es también importante, y por lo tanto los bloques son de tamaño pequeño. El grano grueso, el pequeño tamaño de los bloques y el poco volumen de reservas hacen que estos mármoles resulten interesantes sólo para el mercado interno. Casi todas las canteras están cerradas en la actualidad.
Área de Minas - Pan de Azúcar: mármoles de varios colores (blanco, gris, rosado, rojo, verde y negro) se han explotado en canteras pequeñas utilizando tecnologías inadecuadas y exceso de explosivos. Casi todas las canteras están cerradas actualmente. Esta provincia tiene un interesante potencial para la exploración de variedades de mármol, debido a la interesante paleta de colores y diseños que se observan.
La extracción de mármoles comenzó en Uruguay en las primeras décadas del siglo XX. Los mercados eran el interno y el regional, principalmente la ciudad de Buenos Aires (Argentina). La dificultad para asegurar volumen y homogeneidad de color y diseño, junto con la fracturación debida a tectónica y a técnicas de extracción erróneas, además de una desfavorable relación coste/precio y pobres estrategias de mercado, llevaron a un declive constante de la producción desde 1990 (2.900 Toneladas), arruinando a la mayor parte de las canteras (39 toneladas en 2005). En el mercado interno la producción tiene que competir con mármoles importados de Argentina, Brasil e incluso España.
Filitas
Esta filitas están asociadas al cinturón de esquistos del Cinturón Dom Feliciano. La provincia minera principal está ubicada entre las localidades de Pan de Azúcar y Minas (Fig. 1). Las canteras se ubican en los flancos de pliegues de una secuencia calco-silicatada, donde la estratificación y la foliación son paralelas.
El principal litotipo es una filita calcárea, con fino bandeado por color y composición. La mineralogía es sericita, clorita, calcita y cuarzo y la textura lepidoblástica a grano-lepidoblástica. La paleta de colores es bastante variada: verde claro, gris, gris oscuro, rojizo y negro. La piedra extraída es exfoliada en lajas de 0,5 a 2 cm de espesor y procesada de dos maneras: piedras irregulares y baldosas escuadradas para suelos. La producción media en el período 1997-2005 fue de 3.991 toneladas. En 1993 se alcanzó un máximo histórico de 13.000 toneladas.
El potencial de este recurso es alto, pero las variaciones en la demanda del mercado regional constituyen la principal limitación y son a la vez la causa de los ciclos de florecimiento y decadencia de la actividad. La exploración de colores y calidades es un requisito previo para el desarrollo del sector.
Areniscas
Las areniscas ligeramente litificadas de la formación de Tacuarembó (Triásico, Cuenca Norte, ver ubicación en Fig. 1) han sido explotadas de forma discontinua. Estas areniscas cuarzosas de grano fino son de color rojo claro a gris y presentan estratificación paralela. Las areniscas se extrajeron durante las primeras décadas del siglo XX, sólo para el mercado interno. Después de varias décadas de inactividad, una pequeña producción comenzó hace unos pocos años (774 toneladas en 2004 y 1.014 en 2005). No hay parámetros geotécnicos disponibles.
e).- Mármol Artigas (zona de Minas – Pan de Azúcar)
f).- Mármol Maroco (zona de Minas – Pan de Azúcar)
g).- Colección de filitas
h).- Areniscas (formación Tacuarembó
Otras rocas ornamentales con potencial
Cuarcitas con fucsita
El borde oriental del Terreno Nico Pérez está caracterizado por una asociación litológica de cuarcitas y rocas metamórficas ultramáficas que afloran a lo largo de más de 200 km (Spoturno et al. 1986; Oyhantçabal & Vaz, 1990). Las rocas ultramáficas de esta asociación son actinolítitas y tremolítitas con alto contenido de Cromo y Níquel (más de 1000 ppm), lo que sugiere que los protolitos son piroxenitas y/o periodoritas. Los minerales accesorios de las cuarcitas asociadas son muscovita, silimanita y fucsita. Cuando esta última es abundante, las cuarcitas tienen un color verde esmeralda claro y pueden representar una roca ornamental de valor interesante.
Conglomerados
Los paraconglomerados fuertemente litificados de la Formación Las Ventanas (edad Ediacarense, ver localización en Fig. 1) están asociados con los molasas del Cinturón Dom Feliciano. La consolidación de estos conglomerados es tan fuerte que habitualmente afloran como rocas redondeadas similares a bloques de granito y podrían ser aptos para el aserrado y la elaboración de baldosas. La variabilidad en los colores (gris, rojizo, verde, etc) de los cantos (compuestos de granito, mármol, filita, riolita, etc,), hace que estos conglomerados tengan un interesante potencial como roca ornamental.
Anortositas
Se han identificado varias intrusiones máficas en el Terreno Paleoprotozoico de Piedra Alta. Aparte del interés por la posible existencia de depósitos de roca negra (gabros y doleritas), algunos de estos plutones contienen niveles de anortosita, que podrían ser interesantes prospectos para roca ornamental de color claro.
Conclusiones
Aunque pequeño y sin una gran tradición en minería, Uruguay tiene una compleja geología que incluye rocas cristalinas Arqueanas, Paleoproterozoicas y Neoproterozoicas, pertenecientes a diferentes terrenos geológicos. Esta geología diversa ofrece una amplia variedad de rocas ornamentales. En algunos casos (granitos y mármoles) la minería tiene una historia de más de un siglo, de suministro de roca ornamental y piedra natural para la metrópolis de Buenos Aires y, en menor volumen para la propia capital del país (Montevideo). El país ha suministrado también roca ornamental a Europa y Japón en las últimas décadas. Un caso extraordinario es el de la dolerita negra de Uruguay, que representa la roca ornamental negra más valiosa del mundo. La demanda de estas doleritas excede las posibilidades de suministro, la escasez de reservas evaluadas debido a la falta de exploración y una mala técnica de extracción son factores que limitan una producción adecuada. Los recursos mencionados junto a las filitas y algunas rocas ornamentales potenciales tales como las cuarcitas con fucsita y los conglomerados permiten evaluar un futuro prometedor para las rocas ornamentales del Uruguay.