Desde hace varios años, los fabricantes, que antes sólo trabajaban con piedra natural, ahora también lo hacen con materiales como el porcelánico de gran formato. ¿Cuál ha sido la experiencia de trabajo? Hemos preguntado a varias personas relacionadas con la industria de la piedra en España sobre instalación, mantenimiento, conocimiento por parte de las tiendas y del usuario final, reclamaciones, precios y tendencias de ambos materiales. A continuación, sus respuestas.
Vicente Alcácer DAS-TECH Solutions, Castellón. Empresa especializada en maquinaria
Las máquinas de porcelánico para tratamiento de superficie suelen ser menos robustas, así una máquina de mármol puede durar muchos años.
En tema de corte, las de porcelánico son máquinas más potentes ya que el porcelánico es más duro.
La velocidad en porcelánico es más crítica, y se necesitan más motores de corte y de potencia superior. Por ejemplo, una multidisco de corte de listelos en piedra puede trabajar a 3 m/min con 1 motor de 15 CV. Para hacer eso en porcelánico se necesita motores de 30/40 cv y un mínimo de 2 motores
Para transporte de porcelánico, se utilizan diámetros de rodillo más pequeños pero más rápidos, llegando a velocidades hasta 40 m/min; en mármol, las velocidades suelen ser más bajas, 2-3 m/min, y son bancadas más robustas, pero menos complejas. En cerámica se necesitan más herramientas, y mayor número de repuestos en general
David Guillem, MÁRMOLES GUILLEM E HIJOS, Catarroja (Valencia)
El porcelánico es un material que tiene muchas incidencias. Trabajo con una empresa aseguradora y puedo decir que la cantidad de incidencias es muy alta.
Esto se debe a que no se informa bien al cliente de lo que se les está vendiendo y no hablo de los marmolistas, sino de los de las tiendas que, con el afán de vender, no explican los problemas que generan y se hacen trabajos que no están bien acabados.
Luego está el tema de los precios, que no se respetan. Antes, cuando no había tanta competencia porque no había tantos fabricantes, los precios eran estables pero, ahora, al haber muchos, van bajando los precios para sacar sus productos.
Al colocar una encimera de piedra vas una vez, la colocas y no tienes que estar volviendo. Con los otros materiales normalmente hay que ir más veces.
Por culpa de las encimeras de porcelánicos no se están haciendo los trabajos correctos. Como lo de hacer "L" en las encimeras con porcelánicos. Es una locura. No se debe de hacer porque generan mucha tensión en el material y se desconcha, o como cuando juntas las piezas y pasa lo mismo. También influye en que no se rompa al colocarlo el que los muebles de cocina estén muy bien nivelados, y no siempre es así.
El porcelánico es un material muy delicado. Para nada es igualable a la piedra natural.
Espero que todo esto sea una moda pasajera y ya tenemos ganas de que lo retiren algún día.
Pelegrín de Andrés MÁRMOLES PELEGRÍN, Aranda de Duero (Burgos)
Por la trayectoria de muchos años de actividad, es más fácil elaborar materiales pétreos, aunque en los porcelánicos, debido a la tendencia de acabados de cantos y su textura mate en la mayoría, se utilizan menos herramientas de mecanizado. La instalación de los nuevos materiales, por un lado, es más cómoda porque tienen menos peso, con lo que la accesibilidad al lugar de montaje es más fácil, por otro la posibilidad de astillados es mayor.
Ninguno (ni porcelánicos ni piedra) da problemas de mantenimiento ordinario, excepto los colores muy oscuros que exige una limpieza más minuciosa que otros colores, quizás el material con más fácil mantenimiento es la piedra natural. La duración de ambos tipos de material puede ser similar, aunque los materiales naturales mantienen su belleza durante mucho más tiempo que cualquier artificial, hay casos en que se mejora. Una piedra natural, aún deteriorada, mantiene una belleza y un encanto especial, mucho más noble, que no puede conseguir nunca un material artificial por muy bien imitado que esté.
En lo que se refiere a reclamaciones por parte del cliente, en piedras naturales, hay pocas, como consecuencia del poco conocimiento que se tiene de su origen y transformación, por creer que todas las piedras son iguales y la pretensión de exigir a un material características de otros materiales. En compactos de cuarzo, las reclamaciones son por temas de decoloraciones, alabeos y excesos por calentamiento. En porcelánicos, las reclamaciones se dan por temas de astillados en los bordes,
Las gamas de colores en todos los materiales son muy extensas, muy por encima de las necesidades de los clientes, lo que sí hay que considerar es que los materiales artificiales tienen una más fácil y mayor variación de tonos, como consecuencia de modas, pero las piedras naturales son una fuente inmensa de colores con posibilidades de cambios de textura, tantas que muchísimos materiales artificiales no son si no imitaciones de materiales naturales.
En los tiempos actuales, con fuerte competencia, el margen de beneficio por material está relacionado directamente con el coste. La estabilidad de precios está más en función de factores de costes de fabricación, transformación y comercialización, que en la naturaleza del producto
Hay pocos o muy pocos apoyos en caso de rotura, más influenciados por el interés de la relación comercial entre proveedor y transformador
Con respecto al conocimiento sobre los materiales por parte de tiendas y cliente finales, muy pocas tiendas conocen en profundidad los materiales que ofrecen, se rigen principalmente por razones comerciales y estéticas de cada momento. Los clientes finales directos de marmolería pueden conocer más detenidamente las características tanto de materiales naturales como fabricados, los que lo hacen a través de tiendas de decoración, atienden a la información y pericia que tenga el vendedor; en cualquiera de los dos casos, parece que atienden a las explicaciones que les ofrece su interlocutor.
Al cliente final no le importa mucho distinguir los materiales, le interesa más que cumpla con sus requisitos, bien estéticos, prácticos, económicos o sociales
Creemos que el marmolista con mucha experiencia prefiere materiales naturales, quizás por deformación profesional, pero creemos que todos han demostrado que trabajan el material que, de una u otra forma, le pidan sus clientes para mantenerles satisfechos incluso, en algunos casos, a costa de su propia salud.
En cuanto a tendencias, se observa que los porcelánicos están ocupando el sitio en que, hasta hace poco, se utilizaban principalmente piedras naturales como en fachadas, escaleras, pavimentos en obra. También están haciendo pensar en utilizar, tanto productos fabricados como naturales, para aplicaciones de mobiliario y decoración de todo tipo y en todo tipo de estancias como salones, dormitorios, etc. Lo que sí estamos viendo es que se tiende a pensar en personalizar cualquier zona a decorar, incluso mezclando materiales fabricados con naturales y en cualquier ámbito.
Francisco Fuentes QUIMICROSS, Aspe (Alicante) empresa fabricante de productos químicos para el tratamiento de superficies
La pregunta sobre qué material es más cómodo de trabajar contiene un grado de complejidad muy elevado, en los dos casos (porcelánico y piedra) se debe coordinar la zona o situación donde se vaya a colocar un material u otro.
En principio la piedra natural da más problemas, salvo que haya recibido el tratamiento idóneo para la función para la cual se le destina y también pensamos que debemos adecuar las características del tipo de piedra a dicha función. Sobre los porcelánicos, tienen unas características más genéricas pero también hay que hacer una elección idónea a la función que deben realizar o situación donde estén colocados, por ejemplo poner un porcelánico que no tenga un grado idóneo de antideslizamiento limítrofe a una piscina o a un baño no es lo correcto, también este problema se puede resolver mediante un tratamiento químico.
En cuanto a la diferencia de la durabilidad es también muy relativa, puesto que los porcelánicos son prefabricados de nueva generación y aún no ha pasado un tiempo relevante para evaluar su estado en el tiempo. La piedra natural nos indica a través del tiempo ya demostrado la durabilidad de la misma, valgan dos ejemplos las pirámides de Egipto o la gran muralla China.
STONE GROUP, Madrid. Empresa especializada en proyectos en piedra natural y porcelánicos
Los dos materiales (porcelánico y piedra) presentan algunas ventajas y desventajas en el proceso de elaboración. Por ejemplo, la piedra natural suele ser más fácil de cortar y, en el caso de que haya que hacer una reparación o un pulido, es más agradecida. El porcelánico, no presenta estas ventajas, pero, sin embargo, es más liviano, lo que hace que sea más fácil de manipular y montar.
El porcelánico pesa menos, por lo que es más fácil de instalar. La piedra natural, además, presenta un riesgo añadido, y es que cada pieza es única. Las tablas de porcelánico, sin embargo, son todas iguales y se pueden sustituir fácilmente en caso de que haya una rotura, por ejemplo.
El mantenimiento de cada material depende mucho del uso que le des. Por ejemplo, el porcelánico no es poroso y la piedra sí, por lo que, si buscas una encimera de cocina, la piedra necesitará mayores cuidados para no estropearse. Sobre todo, si usamos productos abrasivos.
Por su parte, como ya comentamos antes, la piedra natural es más agradecida en caso de tener que hacer un pulido para disimular alguna pequeña rotura o descascarille.
La piedra natural, por norma general, dura más. El ejemplo más claro lo tenemos en esas encimeras de granito que colocaban nuestros abuelos y que, a día de hoy, siguen en pie y en perfectas condiciones. Aún así, es cierto que, como todo, se van envejeciendo con el paso del tiempo y pueden modificar su tono con la luz solar, al igual que cualquier material natural como la madera. El porcelánico mantiene el tono y color durante toda su vida útil.
En lo que se refiere a reclamaciones por parte del cliente, en el caso del porcelánico, puede ser que haya más incidencias relacionadas con roturas o descascarilles, principalmente en los cantos. Los problemas de la piedra natural suelen estar más relacionados con su uso y cuidado. Es un material más poroso y delicado ante productos corrosivos.
Por norma general, el porcelánico ofrece más colores, gamas y texturas, ya que se puede crear prácticamente cualquier tipo de acabado con él. La variedad de la piedra natural dependerá mucho más de la demanda del mercado. Hay que tener en cuenta que cada pieza de piedra natural es única y creada por los elementos de la naturaleza, y las canteras se pueden agotar o cambiar los tonos de los modelos.
Normalmente, el porcelánico genera más beneficios porque tiene más mercado, aunque también tiene más competencia. A mismo volumen de ventas, la piedra deja algo más de margen.
El porcelánico es más estable en cuanto a precios. Los costes de adquisición de una piedra natural son más volátiles, por lo que es difícil determinar su precio y el margen que se le puede sacar.
Hablando de apoyos por rotura, en el caso de los materiales que comercializa Stone Group, nosotros ofrecemos un servicio postventa, por lo que analizamos y evaluamos las posibles roturas que se puedan producir en el material una vez montado. En caso de que veamos que la incidencia se debe a un error nuestro en el montaje o a un desperfecto del material, o si queda cubierta por la garantía, nos haríamos responsables de la reparación o, en su caso, de la reposición de la pieza.
Los distribuidores cada vez tienen más conocimientos sobre los materiales porcelánicos, aunque a veces se confunden términos y no saben muy bien qué composición tiene cada marca. Se generaliza todo bajo el mismo nombre. También es más común encontrar profesionales que informan adecuadamente a los usuarios sobre las cualidades y cuidados de cada material.
El usuario se mueve casi siempre por modas, por el diseño general de la cocina. Pero también están cada vez más informados sobre los productos del mercado y suelen preguntar por marcas específicas a las tiendas. Los marmolistas suelen moverse por la rentabilidad del producto o demanda de los clientes.
La gente está optando más por el porcelánico que la piedra, sobre todo para encimeras de cocinas. Además, están los usos habituales del porcelánico, es decir, fachadas, suelos, etc. La piedra natural suele jugar un papel más decorativo, para mobiliario o revestimientos.
